LA CONFIANZA LEGÍTIMA ANTE ACTUACIONES DE FUNCIONARIOS DE HECHO

En el transcurso de su historia el derecho administrativo comparado e incluso el venezolano ha sufrido cambios acerca de la posición del ciudadano frente a la Administración Pública, porque al tener una influencia del régimen administrativo francés, la idea del absolutismo estuvo presente y se llegó a concebir el derecho administrativo como un derecho especial y autónomo, según Hernández González (2015:18) a partir de privilegios y prerrogativas, se colocaba “la Administración en una posición de supremacía frente a los ciudadanos, considerados en este plano como administrados”.

En este sentido, el ciudadano cuenta con la protección que se deriva del principio de legalidad, el cual busca asegurar que la Administración ajuste su actuación a la ley. Este principio en palabras de Araujo Juárez (citado por Hernández, 2015:20), define “unilateralmente el interés público mediante el ejercicio de la potestad, que le permite crear, extinguir y modificar situaciones jurídico subjetivas, mediante el acto administrativo, que se presume válido y como tal, debe ser cumplido, incluso coactivamente por la Administración”.

En base a las ideas expuestas, la concepción del derecho administrativo, centrado en la Administración como poder del Estado, no era democrática sino absolutista como lo fue Francia. Luego de los acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial con “la internacionalización de los derechos humanos” (Nikken
citado por Hernández, 2015), surge la idea de protección de los derechos inherentes a la persona, por el simple hecho de ser individuos de la especie humana. Además, la proliferación de la democracia en Europa en la segunda mitad del siglo pasado, ocasionó un gran cambio en el derecho administrativo, pues de un sistema centrado en el Estado, pasó a ser un sistema centrado en el ciudadano y los derechos humanos. Sin embargo, ese cambio no fue inmediato ni uniforme en todos los sistemas jurídicos, por el contrario fue progresivo. Cabe destacar el cambio de concepción, de administrado pasó a ser ciudadano, titular de derechos humanos frente a la Administración, en todo sistema democrático.